Autores
Erin P. Herlihy, John P. Kelly, Robert Sidbury, Jonathan A. Perkins, Avery H. Weiss. J AAPOS 2016; 20: 30-33
Resumen
Los hemangiomas perioculares infantiles pueden producir astigmatismo y ambliopía secundaria en el ojo afectado. En la actualidad la terapia con betabloqueantes orales ha sustituido al tratamiento con corticoides sistémicos o intra-lesionales. El propósito del trabajo es evaluar el efecto de ambos tratamientos sobre la AV y el astigmatismo inducido. Se recogieron los datos de 17 pacientes con hemangioma periocular infantil que fueron diagnosticados y tratados con betabloqueantes orales y otro grupo similar con corticoides intralesionales entre 2008-2013 para comparar la AV y el astigmatismo preoperatorios y postoperatorios. La edad media de iniciación del tratamiento fue de 4.5 ± 2.3 meses (rango, 1-10), edad que coincide con la edad de máximo crecimiento del tumor, y la edad media de la última refracción fue de 17.8 meses (7-43 meses). La media del astigmatismo previo al propanolol fue de 1.90 y de 1 D después del tratamiento mostrando una reducción monofásica del mismo a lo largo de un periodo de 12 meses (P = 0.0033). En comparación, los pacientes tratados con corticoides intralesionales mostraron una respuesta bifásica, primero rápida y luego lenta, de la disminución del astigmatismo. El propanolol oral causó una reducción del 47% de la media del astigmatismo inducido por el hemangioma, menor que el 63% del conseguido con los corticoides. Ningún paciente tratado con propanolol tuvo una reducción de la AV en el ojo afectado, ni experimentó efectos secundarios con el tratamiento. Ninguno de los pacientes tratados con propanolol tuvo que ser operado de deformidades de los tejidos blandos perioculares.
Comentario
Los hemangiomas perioculares infantiles son tumores vasculares benignos que regresan típicamente en la infancia precoz. La curvatura corneal en los neonatos es fácilmente deformable por lo que estos tumores pueden producir ptosis y astigmatismo corneal que secundariamente provocan ambliopía por lo que es muy importante conseguir cuanto antes la reducción del tumor. Históricamente esto se había conseguido con corticoides tópicos, intralesionales o sistémicos, con buenos resultados, pero con importantes efectos secundarios. La vincristina y la ciclofosfamida, asi como el interferón y la excisión quirúrgica del tumor han sido también empleados. El hallazgo de la reducción del tumor por los betabloqueantes orales fue un hallazgo fortuito, y desde entonces varios estudios han confirmado el éxito del tratamiento. Un estudio controlado randomizado sobre 456 niños tratados con 3mg/kg/día durante 6 meses también confirmó el éxito en la reducción o desaparición del tumor.
El tratamiento del betabloqueante oral debe ser administrado con control de un cardiólogo pediátrico.
Las limitaciones del estudio son su carácter retrospectivo y el hecho de que muchos pacientes (37) fueron excluidos por falta de datos previos sobre refracción ciclopléjica y AV antes de iniciar el tratamiento.
Conclusiones
En este estudio el tratamiento con beta-bloqueantes orales fue bien tolerado, y los resultados visuales fueron buenos. El tratamiento precoz (a los 4 meses) puede minimizar el efecto potencial del astigmatismo sobre el desarrollo visual posnatal.
Dado los buenos resultados conseguidos con el propanolol oral y en ausencia de complicaciones secundarias se puede considerar como un tratamiento emergente que ha sustituido a los corticoides en el tratamiento de estos tumores.
Autor
Pilar Merino Sanz