Resumen
El objetivo del estudio es determinar los resultados a largo plazo tras tratamiento quirúrgico con vitrectomía de pacientes con agujeros maculares lamelares sintomáticos. Se trata de un estudio retrospectivo de casos consecutivos. Los autores incluyeron 31 ojos de 31 pacientes con agujeros maculares lamelares afectos de pérdida de visión central que fueron vitrectomizados y seguidos al menos durante 1 año. La edad media fue de 65.4 años (DS: 9.5; 38-80 años) y el 80.6% de los casos fueron mujeres. Para el estudio de los agujeros maculares lamelares se utilizó un OCT de dominio temporal (Stratus, Zeiss) y los criterios diagnósticos fueron los siguientes: 1) contorno foveal irregular, 2) rotura en la región foveal interna, 3) separación o hendidura entre las capas retinianas internas y externas, 4) ausencia de defecto de espesor completo con fotorreceptores intactos.
Todos los pacientes fueron operados por el mismo cirujano mediante vitrectomía posterior (de 20, 23 ó 25g), disección de la hialoides posterior y extracción de membranas epirretinianas y membrana limitante interna bajo tinción con verde de indocianina. Finalmente, se realizó intercambio fluido-aire y taponamiento con gas SF6. En el 41.9% de los casos se practicó una cirugía combinada de facovitrectomía. Los pacientes fueron instruidos para permanecer de 3 a 7 días en decúbito prono tras la intervención quirúrgica. El seguimiento medio de los pacientes fue de 39 meses, con un rango de 12 a 80 meses. La agudeza visual postoperatoria mejoró >2 líneas Snellen en 18 casos (58.1%) y disminuyó en 2 casos (6.5%). La ganancia visual media final fue de 0.18 logMAR. La anatomía foveal en la OCT mejoró o se normalizó en el 90.3% de los casos. No se detectaron complicaciones significativas. Los autores concluyen que el tratamiento quirúrgico de los agujeros maculares lamelares sintomáticos es un procedimiento eficaz y seguro tras un seguimiento medio de 3 años de sus pacientes.
Comentario
Los agujeros maculares lamelares son agujeros maculares de espesor parcial en los cuales las capas foveales internas están sometidas a fuerzas traccionales que originan una dehiscencia que las separa de las capas más externas. Las fuerzas traccionales pueden ser anteroposteriores producidas por el vítreo o tangenciales producidas por membranas epirretinianas, cuya asociación a los agujeros maculares lamelares es muy frecuente. Los agujeros maculares lamelares constituyen una entidad cuyo tratamiento es controvertido. Inicialmente se recomienda su observación dado que muchos casos pueden permanecer estables a lo largo del tiempo sin ocasionar una pérdida visual significativa. En un estudio reciente se ha visto que sólo el 22% de pacientes con agujeros maculares lamelares sufrieron una disminución de su agudeza visual tras 3 años de seguimiento con un aumento del tamaño del agujero del 13% determinado por OCT.1 Por tanto, el tratamiento quirúrgico sólo se recomienda en casos sintomáticos.
Garretson y cols. publicaron una serie de 27 pacientes operados mediante vitrectomía y un seguimiento medio de 9 meses. La agudeza visual mejoró en el 93% de los casos con una ganancia media de >3 líneas Snellen. Como complicación, un caso evolucionó a agujero macular de espesor completo tras la cirugía.(2)
Los autores del presente estudio publican una serie más amplia de 31 casos operados con un seguimiento medio de 39 meses. La agudeza visual postoperatoria mejoró >2 líneas Snellen en 18 casos (58.1%). No obstante, hay que tener en cuenta que en el 41.9% de los casos se practicó una cirugía combinada de facovitrectomía, por lo que la agudeza visual pudo mejorar en muchos casos por la extracción de la catarata. Morfológicamente, la anatomía foveal en la OCT mejoró o se normalizó en el 90.3% de los casos. Una limitación del estudio es el uso de una OCT de dominio temporal. Probablemente, con una OCT de dominio espectral se hubieran detectado un mayor número de alteraciones anatómicas foveales.
1. Theodossiadis PG, Grigoropoulos VG, Emfietzoglou I, et al. Evolution of lamellar macular hole studied by optical coherence tomography. Graefes Arch Clin Exp Ophthalmol 2009; 247: 13-20.
2. Garretson BR, Pollack JS, Ruby AJ, et al. Vitrectomy for a symptomatic lamellar macular hole. Ophthalmology 2008; 115: 884-886.
Conclusiones
– Los agujeros maculares lamelares inicialmente deben observarse y el tratamiento quirúrgico sólo debe plantearse en casos sintomáticos.
– El tratamiento quirúrgico de elección consiste en vitrectomía con disección de la hialoides posterior, extracción de membranas epirretinianas y membrana limitante interna, y taponamiento con gas de corta duración.
– Entre las posibles complicaciones postoperatorias cabe destacar la formación de un agujero macular de espesor completo.
AUTOR:
Luis Arias Barquet.