Causas de la cirugía retiniana
Existen diversas situaciones que requieren la intervención quirúrgica por parte del especialista en retina. Entre ellas están el desprendimiento de retina, la hemorragia vítrea diabética no resuelta de forma espontánea, el agujero y la membrana epirretiniana que afecten la calidad visual del paciente, así como el reflotamiento de cristalinos y lentes luxadas.
Procedimientos quirúrgicos retinianos
Vitrectomía
La vitrectomía es una técnica quirúrgica, mediante la cual se entra dentro del ojo a través de unas incisiones de pequeño tamaño, y se extrae el humor vítreo del ojo sustituyéndolo por líquido, gas o aceite.
Este procedimiento es utilizado en el tratamiento de diferentes enfermedades oftalmológicas como son:
- El desprendimiento de retina.
- La hemorragia vítrea: mediante vitrectomía se extrae el gel vítreo junto con la hemorragia localizada en el interior del ojo.
- El agujero y membrana epirretiniana macular: se realiza vitrectomía y retirada de unas finas capas que se encuentran en la superficie de la retina distorsionando la morfología macular normal.
- El reflotamiento de cristalinos y lentes luxadas: vitrectomía y extracción de cristalinos o reflotamiento de lentes luxadas a la parte posterior del ojo.
Láser y crioterapia
La mayoría de los desgarros retinianos necesitan ser tratados mediante láser o crioterapia (congelación). Ambos procedimientos crean una cicatriz alrededor del desgarro retiniano, ayudando a sellar la retina a la parte posterior del ojo. Esto impide que el fluido se introduzca a través del desgarro por debajo de la retina, evitando que ésta se desprenda.
Cerclaje escleral
Este tratamiento consiste en colocar una banda flexible alrededor del ojo, que mediante indentación escleral contrarresta la fuerza de tracción de la retina desprendida.
A veces la vitrectomía se combina con la cirugía escleral.
Retinopexia neumática
En este procedimiento, una burbuja de gas se inyecta en el espacio vítreo dentro del ojo. La burbuja de gas empuja la retina desprendida contra la pared posterior del ojo. A veces, este procedimiento se puede realizar en la consulta.
Cuando la sustancia utilizada es una burbuja de gas, ésta es sustituida gradualmente por los fluidos del propio cuerpo del paciente. En cambio, cuando la sustancia utilizada es aceite, éste tendrá que ser retirado del ojo pasado un tiempo tras la cirugía.
Cuando se inyecta gas en el interior del ojo, su oftalmólogo podrá recomendarle que mantenga constantemente la cabeza en una posición específica durante varios días. Del mismo modo, podrá indicarle evitar volar en avión o viajar a grandes alturas hasta que le confirmen que la burbuja de gas se ha reabsorbido. Esto es debido a que un rápido aumento de altitud puede causar un incremento peligroso en la presión intraocular, por la expansión del gas que se encuentra dentro del ojo.
Dependiendo de su patología oftalmológica, su oftalmólogo decidirá el tipo de procedimiento recomendado, informándole sobre los distintos riesgos y beneficios de sus opciones de tratamiento.