Resumen
Métodos: Se incluyeron 50 ojos de 50 pacientes con PBK sintomática que habían sido sometidos a CXL. Los parámetros evaluados fueron grosor corneal central (CCT), escala de dolor, agudeza visual mejor corregida (AVMC) y transparencia corneal. Las determinaciones se realizaron en la visita basal pretratamiento y en los días 7, 15 y mes 1, 3 y 6 tras CXL.
Resultados: La puntuación media de dolor en una escala decimal mejoró significativamente desde 8.1 a 2.1 en el día 7, con regresión posterior hasta situarse en una puntuación media de 5.3 a los 6 meses. El CCT se redujo significativamente desde un valor basal medio de 724.8 μ a 694. 9 μ al final del primer mes, permaneciendo estable en las sucesivas visitas. La BCVA mejoró significativamente hacia el final del primer mes, con descenso posterior hasta los valores preoperatorios al final del estudio. Las bullas corneales recurrieron en 22 ojos (44%) a los 6 meses tras una desaparición inicial de las mismas. Los mejores resultados en cuanto a mejoría y mantenimiento de la BCVA así como a ausencia de recurrencia de las bullas ocurrieron en los pacientes con menor CCT al inicio.
Conclusiones: El CXL mejora transitoriamente el dolor en la PBK sintomática sin aportar mejoría prolongada en la BCVA de los pacientes. Es importante una selección de los casos puesto que aquellos con menor CCT basal muestran mejores efectos asociados al CXL.
Comentario
El procedimiento quirúrgico consistió en la retirada del epitelio en un área de 9.0 mm centrales, sobrecarga corneal con riboflavina isotónica y aplicación de UVA a 3 mW/cm2 durante 30 minutos. El tratamiento postoperatorio consistió en antibióticos y corticoides tópicos y lente de contacto terapéutica. Las determinaciones se realizaron siguiendo el esquema señalado previamente y consistieron en determinación de BCVA, CCT (paquimetría ultrasónica y OCT de segmento anterior-ASOCT-), la transparencia corneal se determinó en una escala de 1 a 4+ en la lámpara de hendidura y el dolor en una escala analógica de 1-10.
Los autores encuentran una mejoría significativa en la escala de dolor desde la primera visita, con pérdida del efecto alcanzado en las visitas posteriores, coincidiendo con lo publicado por otros autores2. En cualquier caso, el nivel medio de dolor a los 6 meses del tratamiento era sensiblemente inferior a la situación basal pretratamiento, y algunos autores como Cordeiro-Barbosa2 en un estudio prospectivo con 25 ojos publica que un 44% de los pacientes se permanecen asintomáticos al final del seguimiento. El CXL también se asoció a una reducción significativa y sostenida en el CCT debido al efecto de compactación del colágeno y a una mayor resistencia al acúmulo de fluido. El procedimiento también produjo una mejoría visual transitoria con deterioro posterior de la misma hasta un nivel similar al basal, si bien los autores señalan que no es procedimiento que se plantee con finalidad de rehabilitación visual. La transparencia corneal también mejoró en el postoperatorio inicial con regresión posterior del efecto a los 6 meses. Las bullas recurrieron en un 44% de los pacientes, pero no lo hicieron en un 56%.
Los autores señalan como muy interesante el efecto obtenido en las corneas con menor CCT preoperatorio en los que la mejoría visual fue sostenida y además las bullas no recurrieron. Este efecto ha sido atribuido a una mayor penetración del UVA en las corneas menos edematosas. En este sentido, los autores sugieren que podría considerarse un tratamiento con CXL tras haber realizado una técnica previa de adelgazamiento corneal.
Conclusión
AUTOR:
David Díaz Valle.
Hospital Clínico San Carlos. Madrid.
Referencias:
1 Wollensak G, Aurich H, Wirbelauer C, et al. Potential use of riboflavin/ UVA cross-linking in bullous keratopathy. Ophthalmic Res. 2009;41: 114–117.
2Cordeiro Barbosa MM, Barbosa JB Jr, Hirai FE, et al. Effect of crosslinking on corneal thickness in patients with corneal edema. Cornea. 2010;29:613–617.