Autores:
Schur RM, Sheng L, Sahu B, Yu G, Gao S, Yu X, Maeda A, Palczewski K, Lu ZR.
Las enfermedades degenerativas de la retina se caracterizan por una acumulación patológica de residuos de los cromóforos de los fotorreceptores. Para el estudio de esas patologías se desarrollaron modelos animales, mediante daño inducido por luz. Las aminas primarias, como la retinilamina, resultaron protectoras de ese daño.
El ciclo natural de los fotorreceptores está mediado por canales de calcio, y la actividad de dichos canales puede ser monitorizada mediante la resonancia magnética nuclear potenciada con manganeso (MEMRI) Esta técnica ya se usa para estudiar otras vías sensoriales y otras enfermedades oftalmológicas, como el glaucoma.
Resumen
Cumpliendo con la normativa de experimentación animal se aplicó el modelo de degeneración retiniana mediante luz a grupos de ratones tratados y no tratados con retinilamina.
Tras 6 días se les realizó electorretinograma (ERG), tomografía de coherencia óptica (OCT) e injección de manganeso intravítrea en el ojo derecho y posterior MEMRI. Finalmente los ratones fueron sacrificados y se prepararon muestras de tejido para tinción con hematoxilina-eosina.
En las imágenes obtenidas por OCT los animales tratados con retinilamina presentaron un grosor mantenido en la capa nuclear externa, así como aquellos animales no expuestos a la luz, mientras que los no tratados mostraban retinas totalmente destruidas.
Los estudios histológicos tuvieron resultados similares, con marcado adelgazamiento retiniano y pérdida de fotorreceptores en los ratones no tratados, que no aparecía ni en los tratados ni en los controles que no fueron expuestos a iluminación.
En ERG los sujetos no tratados presentaban mínimas respuestas tanto fotópicas como escotópicas a diferencia de los que fueron inyectados con retinilamina y los controles.
Finalmente la MEMRI en los ratones tratados y en los controles estaba más potenciada en el ojo inyectado con mangneso. Los no tratados no presentaron ningún cambio.
Comentario
El uso de MEMRI permite evaluar la eficacia del tratamiento profiláctico con retinilamina del daño retinianano inducido por luz, confirmándose mediante las pruebas anatómicas y funcionales habituales.
Esta técnica podría implementarse en el estudio de enfermedades de fenotipo similar al del modelo, como la enfermedad de Stargard o la DMAE. Además, el aclaramiento del manganeso en el vítreo permite estudiar el comportamiento del ojo tras la aplicación de sustancias terapéuticas, lo cual no era posible con las otras técnicas descritas.
En el futuro esta técnica podría ser aplicada al resto del sitema visual, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de diversas patologías.
Conclusión
Estamos ante una prueba prometedora que podría contribuir a un mejor conocimiento de la etiopatogenia de diversas enfermedades retinianas y una mejor monitorización de sus tratamientos.
AUTOR:
Esther Rodríguez Domingo
Oftalmóloga del Complejo Asistencial Universitario de León