Resumen
Métodos: Se trata de un estudio de serie de casos retrospectivo en el que se dividió a los pacientes en dos grupos. El Grupo 1 estaba integrado por pacientes sin trasplante previo que fueron intervenidos mediante PTK (22 ojos de 15 pacientes), mientras que el grupo 2 incluía pacientes que recibieron una PTK sobre una córnea con queratoplastia penetrante (QPP) previa (18 ojos de 14 pacientes). La PTK se indicó por descenso de la agudeza visual, síntomas de erosiones recidivantes, o ambos. Las variables estudiadas fueron los resultados visuales y los patrones de recidiva de las distrofias estromales.
Resultados: La agudeza visual mejor corregida (AVMC) pre y postquirúrgica fue de 0,46±0,25 y 0,51±0,27 (P=0,56) respectivamente en el grupo 1 y 0,16±0,13 y 0,21±0,18 (P=0,25) respectivamente en el grupo 2. El equivalente esférico (EE) medio preoperatorio fue de 1,54±2,59 dioptrías (D) y -5,1±5,8D (P=0,01) en grupos 1 y 2, y el EE postquirúrgico medio fue de 0,44±1,8D y -1,8±4,25D (P=0,19) respectivamente. No hubo diferencia estadísticamente significativa en los índices de eficacia (P=0,73) y seguridad (P=0,62) entre los dos grupos. En el grupo 1, se observó una recidiva leve en siete ojos (32%) y recidiva significativa en cuatro ojos (18%) en una media de 32 y 47 meses tras la PTK respectivamente. En el grupo 2, se observaron recidivas leves en cinco ojos (28%) y significativa en otros cinco ojos (28%), una media de 36 y 50 meses tras la PTK respectivamente.
Conclusiones: La PTK mejora la trasparencia de la córnea central, aliviando los síntomas propios de las erosiones recidivantes y mejorando la agudeza visual en ambos grupos.
Comentario
El estudio pretender comparar la eficacia y seguridad de la PTK en pacientes con distrofias estromales con QPP previa o sin ella, valorando la agudeza visual, las recidivas y la mejoría sintomática. Incluye un tamaño muestral limitado, con algunas de las características preoperatorias demográficas y refractivas de los pacientes no comparables (edad media, esfera, EE y queratometría). Las características de la PTK sí fueron comparables entre ambos grupos, con similar patrón de ablación, tiempo de epitelización y tiempo en alcanzar AVMC. Los resultados visuales son similares en ambos grupos, con una ganancia media cercana a las tres líneas de visión en ambos grupos. El porcentaje de ojos que presentó recidivas de la distrofia fue similar en ambos grupos, siendo las recidivas significativas (pérdida de AVMC o más de dos erosiones recidivantes al mes) de un 18% en el grupo 1 y del 28% en el grupo 2. Las recidivas significativas con reducción de AVMC pueden ser tratadas de nuevo con una PTK, mejorando la visión en todas ellas. No hubo complicaciones infecciosas o de epitelización relacionadas con la PTK, más allá de un retraso de epitelización con buen resultado final en el grupo 2 (25 días, AVMC final de 20/25). La tasa de haze que apareció en ambos grupos (9% y 39% respectivamente) se encuentra en el rango publicado previamente.
Conclusión
AUTOR:
PEDRO ARRIOLA-VILLALOBOS.
Hospital Clínico San Carlos. Madrid