Autores:
Cruzat A, Schrems WA, Schrems-Hoesl LM, Cavalcanti BM, Baniasadi N, Witkin D, Pavan-Langston D, Dana R, Hamrah P.
La reciente aparición de la microscopía confocal in vivo ha hecho posible la estandarización de la inflamación corneal. De la misma manera pueden estudiarse los cambios producidos tras un episodio de queratitis.
Con una aproximación comparable a la histología esta técnica distingue las capas de la córnea y sus tipos celulares, incluyendo las células de estirpe inmune por su morfología dendritiforme.
Resumen
Para la realización de este estudio fueron reclutados pacientes afectos de queratitis microbiana de distintas etiologías y se estudió tanto su ojo afecto como el sano. Como controles se tomó a voluntarios sin patología corneal y un grupo control adicional de usuarios de lentes de contacto.
Se realizó exploración completa y estesiometría mediante monofilamento retráctil. La microscopía confocal fue adquirida mediante tomógrafo Heidelberg en la zona central de la córnea y posteriormente analizada por observadores enmascarados. Cuantificaron las células dendritiformes y el plexo corneal subbasal (longitud, número de ramas y densidad)
Los pacientes con queratitis bacteriana, fúngica y por Acanthamoeba presentaban un aumento de células dendritiformes en ambos ojos respecto a ambos grupos control. No se hallaron diferencias según las etiologías.
El plexo nervioso estaba disminuido en los ojos contralaterales de los pacientes respecto a los controles, siendo proporcional al grado de gravedad de la queratitis. Los ojos afectos presentaban alteraciones más marcadas , sin diferencias destacables entre las etiologías.
Estos dos parámetros presentaron correlación, es decir, a mayor cantidad de células dentritiformes menor longitud total del plexo nervioso.
La disminución de sensibilidad tenía buena correlación con la reducción del plexo en el grupo de pacientes. En los ojos contralaterales estaba reducida, pero no presentó significación estadística, probablemente por su menor severidad.
Comentario
Distintos estudios han demostrado alteraciones en el plexo nervioso corneal de ambos ojos tras una patología unilateral. Este artículo apunta en esta misma dirección y además identifica células de estirpe inmunológica en el ojo sano, aunque solo lo hace por métodos morfológicos y no fenotípicos.
Patogénicamente la liberación de neuropéptidos desde los nociceptores, desencadenanaría una inflamación neurogénica, con alteración vascular y respuesta inmune causante de los efectos bilaterales.
Las alteraciones previas a la infección no justificaban los hallazgos, porque el grupo de usuarios de lentes de contacto no presentó cambios significativos.
Sin embargo, debemos cuestionar la validez del uso del ojo contralateral como control en los ensayos clínicos, dado que puede estar alterado por una respuesta simpática subclínica.
Conclusión
Estos hallazgos sugieren que la respuesta inmunológica desencadenada ante una queratitis implica también mecanismos y vías sistpueden afectar al ojo adelfo.dríos ino como ya se ha comentado recientemente émicas que pueden afectar al ojo adelfo.
AUTOR:
Esther Rodríguez Domingo
Oftalmóloga del Complejo Asistencial Universitario de León