Autores del artículo original:
MiYoung Kwon, PhD, Carrie Huisingh, MPH, Lindsay A. Rhodes, MD, Gerald McGwin, Jr., MS, PhD, Joanne M. Wood, PhD, Cynthia Owsley, PhD, MSPH
Resumen
Conducir su propio vehículo es el medio de transporte preferido para los estadounidenses de mayor edad, grupo con elevado riesgo de colisiones con resultado de muerte (CRM), riesgo que aumenta especialmente a partir de los 70 años. Una adecuada visión resulta imprescindible para garantizar la seguridad en la conducción. El glaucoma es una causa de pérdida visual irreversible en los ancianos en Estados Unidos. Se ha demostrado que las personas con pérdida visual severa refieren dificultades a la hora de conducir. A pesar de estas evidencias existen datos contradictorios en la relación entre pérdida campimétrica y CRM.
Los autores plantean un estudio poblacional en que el reclutan 2000 sujetos mayores de 70 años con permiso de circulación residentes en el Norte y centro de Alabama. En todos ellos se valora el estado cognitivo mediante el test Mini-Mental, además de someterlos a un exámen visual y un cuestionario general de salud (el proceso es realizado por personal auxiliar entrenado). Se consideran glaucomatosos los sujetos con una historia documentada de glaucoma por su oftalmólogo en los últimos 5 años, se excluyen aquellos con hipertensión ocular o sospecha de glaucoma como único dato. A todos los participantes que son finalmente elegibles se les determina agudeza visual binocular (AVB), sensibilidad al contraste binocular (SC) y el campo visual de conducción (CVC). El CVC es binocular y se conforma en base a 60º a derecha e izquierda, 15º superiores y 30º inferiores. La AV mínima necesaria para obtener un permiso de circulación en Estados Unidos es 20/40 (0.3 LogMAR).
El análisis estadístico se realiza mediante un modelo de regresión de Poission y se definen intervalos de confianza al 95% para establecer la asociación entre padecer glaucoma y el riesgo de estar involucrado en una CRM, una vez ajustados los factores de confusión (edad, sexo y estado cognitivo). Las edades están entre 70 a 98 años (72% tienen entre 70 y 79 años); el 56% de los conductores son varones; los resultados del Mini-Mental son compatibles con ausencia de demencia en el 98%; 11% tienen un diagnóstico confirmado de glaucoma; la AVB es ≥ 20/20 en el 57% y ≥20/40 en >90%. Según los datos recogidos en los cuestionarios cada conductor realiza un promedio de 9503 millas (15293 km). A la hora de analizar la relación entre el CVC y el riesgo de CRM identifican 6 formas de afectación: difusa, CV superior, CV inferior, CV izquierdo, CV derecho, meridiano horizontal y meridiano vertical. Existe un riesgo significativamente mayor de CRM cuando se dan una de 3 formas de afectación de las 6 posibles: CV izquierdo > CV superior > CV inferior. Los autores ponen ejemplos de CV severamente afectados en pacientes involucrados en CRM.
Comentario
La conducción segura, sin duda, requiere unas condiciones físicas y psíquicas óptimas. El glaucoma disminuye la percepción visual en mayor o menor medida, por lo que es razonable pensar que supone un factor de riesgo para verse involucrado en accidentes de tráfico. Evidentemente la localización y severidad de los defectos campimétricos condicionan las limitaciones de los conductores.
La mayoría de nuestros pacientes mayores, glaucomatosos o no, no tienen conciencia de la repercusión de sus alteraciones visuales en la seguridad a la hora de conducir. Actualmente los reconocimientos médicos para la obtención del permiso de circulación son bastante laxos, y no incluyen pruebas visuales específicas, más allá de la determinación de la AV, de manera rutinaria. Nuestro papel como oftalmólogos debería ir más allá de la atención médica, insistiendo en concienciar a nuestros pacientes de la responsabilidad en la propia seguridad y en la de otros conductores, renunciando de manera voluntaria a la conducción en caso de peligro.
AUTORES:
Dra. María Dolores Morillo Rojas
F.E.A. Oftalmología
Departamento de Glaucoma
Hospital General del S.A.S. de Jerez
Dr Javier Benítez-del-Castillo Sánchez
Responsable Departamento de Glaucoma
Hospital General del S.A.S. de Jerez
Profesor Asociado de Oftalmología
Universidad de Cádiz